Políticas Lingüísticas en México: Reflexión
México tiene la
población de hablantes de lenguas indígenas más grande y la mayor diversidad
lingüística de América Latina. Dicha diversidad constituye una gran capital
cultural por la que deberíamos sentirnos orgullosos; pero al mismo tiempo, es
un factor que dificulta su abordamiento, ya que, en el interior de cada lengua
se encuentran
variaciones fonológicas, morfológicas, semánticas y sintácticas.
A su vez, en su ámbito exterior, la complejidad por saber aquellas realidades sociales, políticas, económicas, y culturales en las que conviven los hablantes de estas lenguas han dejado estudios inconclusos o bien falta de estos.
Conociendo estas dos diversidades que presentan las lenguas indígenas, no se sabe exactamente cuántas leguas se hablan en el territorio mexicano y aunque se dice que existen 68 pueblos indígenas hablantes de 68 lenguas diferentes y 364 variantes etnolingüísticas (INEGI), la dificultad para saber el numero exacto se debe principalmente a que a que la información censual que se recauda no es suficiente. Otro factor es que en algunos casos la población indígena no se reconoce como tal para no ser marginada o bien por cuestiones de prestigio.
A su vez, en su ámbito exterior, la complejidad por saber aquellas realidades sociales, políticas, económicas, y culturales en las que conviven los hablantes de estas lenguas han dejado estudios inconclusos o bien falta de estos.
Conociendo estas dos diversidades que presentan las lenguas indígenas, no se sabe exactamente cuántas leguas se hablan en el territorio mexicano y aunque se dice que existen 68 pueblos indígenas hablantes de 68 lenguas diferentes y 364 variantes etnolingüísticas (INEGI), la dificultad para saber el numero exacto se debe principalmente a que a que la información censual que se recauda no es suficiente. Otro factor es que en algunos casos la población indígena no se reconoce como tal para no ser marginada o bien por cuestiones de prestigio.
El
conocer el número de lenguas, sus características y el grado de
diversidad que actualmente existe, su realidad
social, política, económica e ideológica que rodea a
los pueblos hablantes de estas lenguas, ayudaría a la implementación
de políticas específicas para evitar su completa extinción; o bien,
para revitalizarlas y promoverlas alrededor de la república e incluso
en el mundo.
Algunos estudios afirman que existe debilidad en las políticas lingüísticas mexicanas, en donde se preocupa más por el rescate de una lengua que en la de explorar espacios que garanticen su igualdad, uso y ejercicio. Hay que reiterar que si desaparece una, no sólo se pierde el instrumento de comunicación, sino que se pierde una memoria histórica, un reservo de información cultural y ecológica.
Para mayor información, puedes consultar la siguiente dirección: Agencia Quadratín
A continuación se describe brevemente algunas políticas lingüísticas para entender a mayores rasgos el deterioro de las lenguas indígenas, para mayor información, dale click aquí.
*Independencia: la lengua como elemento de identidad nacional
El coordinador de la enseñanza del náhuatl del Centro de Lenguas Extranjeras (CENLEX), Unidad Zacatenco, del Instituto Politécnico Nacional (IPN) precisó que México se encuentra entre los 10 países del mundo con mayor cantidad de dialectos originarios.
El catedrático sostuvo que la migración por falta de fuentes de empleo, la desaprobación social, la adopción del español, la mezcla de lenguas y la oposición de algunos grupos étnicos por adaptarse a los cambios lingüísticos, propicia la reducción de hablantes de los dialectos.
“El Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI) desarrolla un modelo de acreditación y certificación en materia de lenguas indígenas, que contempla la elaboración del Sistema de Normalización de Competencias en Materia de Lenguas Indígenas (SNCMLI)”, expuso Villanueva Vallejo.
Además señaló que para la enseñanza de la lengua se apegan a los parámetros indicados en el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas y se pretende que al término de los 15 módulos que conforman el plan de estudios del náhuatl, los estudiantes desarrollen el dominio práctico equivalente al nivel B-1.
Algunos estudios afirman que existe debilidad en las políticas lingüísticas mexicanas, en donde se preocupa más por el rescate de una lengua que en la de explorar espacios que garanticen su igualdad, uso y ejercicio. Hay que reiterar que si desaparece una, no sólo se pierde el instrumento de comunicación, sino que se pierde una memoria histórica, un reservo de información cultural y ecológica.
Para mayor información, puedes consultar la siguiente dirección: Agencia Quadratín
A continuación se describe brevemente algunas políticas lingüísticas para entender a mayores rasgos el deterioro de las lenguas indígenas, para mayor información, dale click aquí.
*El México (pre)colonial: la lengua como instrumento de
dominio político y religioso.
Principalmente se utilizaban las lenguas indígenas para implementar la religión católica y la evangelización de todas las comunidades conquistadas por los españoles. Como las políticas lingüísticas españolas eran más agresivas y se
basaban en la religión, la cultura dominante encontró un vehículo de
comunicación: el español. Como Wurm (1997) explica al hablar de los contactos
entre lenguas, "si dos culturas en contacto no son igualitarias, sino que
una de ellas es dominante o más agresiva que la otra o tiene algún rasgo como
una religión muy fuerte, las influencias tienden a ir en un solo sentido: del
de la lengua que es el vehículo de esa cultura dominante"
*Independencia: la lengua como elemento de identidad nacional
La principal preocupación de los nuevos gobernantes era asegurar la subsistencia nacional, lo cual requería cohesión social, que a su vez se buscaba por medio de la creación de una nación y el establecimiento de una lengua común de carácter nacional. Beatriz Garza (1997) lamenta esa oportunidad única desperdiciada:
"La independencia y todo el siglo XIX —paradójicamente— propiciaron la imposición absoluta y radical del español para todos los habitantes de México. Para los liberales del XIX, ser mexicano implicaba hacer desaparecer las diferenciaciones entre los distintos grupos étnicos. Para resumir, sólo diremos que ni Vicente Guerrero ni Benito Juárez —ellos mismos indios— propiciaron la vida de las minorías lingüísticas dentro de una nación hispano-hablante."
*Las
lenguas indígenas en el México (post) revolucionario (1905-1994)
El
siglo XX puede ser dividido en dos tendencias principales en lo concerniente a
la política lingüística del país. Garza (1997) lo explica de la siguiente
manera:
En cuanto al siglo XX "(...)
hemos tenido dos hitos fundamentales en cuanto al reconocimiento de las lenguas
indígenas. El primero se dio después de la Revolución, hacia los años veinte,
cuando se empezó a buscar la originalidad del pueblo mexicano en sus raíces
prehispánicas. El interés por nuestras culturas indígenas llevó, en general, a
la cultura y a la mayoría de las artes (pintura, escultura, música, gran parte
de la literatura) a indagar en las milenarias y avanzadas culturas
mesoamericanas. El otro hito lo estamos viendo ahora [en 1997], y acaba de
ahondarse en años pasados, a partir de enero de 1994, con el levantamiento de
Chiapas del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, que ha ayudado muy
evidentemente a avanzar en el respeto del uso real de las lenguas indígenas y
en la revaloración de las costumbres de esos pueblos."
*El
proyecto de lengua nacional impulsado por Justo Sierra y la búsqueda de
alternativas (1905-1936)
Ya
durante el Porfiriato se había propiciado el establecimiento de métodos para la
enseñanza de la escritura y la lectura del español, para favorecer su difusión
como lengua nacional. Justo Sierra calificaba
los lenguajes vernáculos de "simples documentos arqueológicos" y sostenía
que el castellano "no sólo [era] la lengua que habló desde su infancia la
actual sociedad mexicana, y porque fue luego la herencia de la Nación, sino
porque siendo la sola lengua escolar, llegará a atrofiar y destruir los idiomas
locales y así la unificación del habla nacional, vehículo inapreciable de la
unificación social"
Estos
ideas se enlazarían con
las de Gregorio Torres Quintero en la organización de las escuelas
rudimentarias para la expansión del sistema educativo a las áreas rurales en la
segunda década del siglo XX. El siguiente fragmento muestra lo que se esperaba
de tal sistema educativo rural:
"La consigna dada al maestro rural es la
de enseñar el castellano sobre todas las cosas; antes que empeñarse en la
enseñanza de la lectura, la escritura, las ciencias naturales y sociales, el
mandamiento es enseñar el castellano y sumado a él la prohibición de usar en la
escuela la lengua del educando, por parte de éste y por parte del enseñante en
los casos en que la conociera".
Se dirige personalmente al lector y le
recomienda: "La función tuya como maestro no consiste simplemente en castellanizar
a la gente, sino en transformarla en gente de razón"
La
creación de la SEP en 1921 había significado el
impulso a la educación rural, el establecimiento de las escuelas regionales,
las normales campesinas y las misiones culturales, siempre con el propósito de
dar a todo México un solo idioma y una escritura en común.
Lenguas Indígenas en peligro de extinción
En un articulo de Internet, un experto exhibe la situación perturbante de estas lenguas. Lo publicó el pasado 9 de Agosto (Día internacional de los Pueblos Indígenas).
"La lenguas indígenas se encuentran el peligro de extinción, por lo que indispensable propiciar su revitalización y fortalecimiento, además de identificar las problematicas de cada región para evitar la perdida de la riqueza cultural del país" aseguro Julio César Villanueva Vallejo.
El coordinador de la enseñanza del náhuatl del Centro de Lenguas Extranjeras (CENLEX), Unidad Zacatenco, del Instituto Politécnico Nacional (IPN) precisó que México se encuentra entre los 10 países del mundo con mayor cantidad de dialectos originarios.
Refirió que en la República Mexicana viven 16 millones de indígenas, de los cuales, cerca de siete millones hablan su lengua madre, sin embargo, el número de hablantes continúa a la baja, lo que pone en peligro la existencia de los dialectos utilizados en el territorio nacional.
El catedrático sostuvo que la migración por falta de fuentes de empleo, la desaprobación social, la adopción del español, la mezcla de lenguas y la oposición de algunos grupos étnicos por adaptarse a los cambios lingüísticos, propicia la reducción de hablantes de los dialectos.
“El Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI) desarrolla un modelo de acreditación y certificación en materia de lenguas indígenas, que contempla la elaboración del Sistema de Normalización de Competencias en Materia de Lenguas Indígenas (SNCMLI)”, expuso Villanueva Vallejo.
Además señaló que para la enseñanza de la lengua se apegan a los parámetros indicados en el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas y se pretende que al término de los 15 módulos que conforman el plan de estudios del náhuatl, los estudiantes desarrollen el dominio práctico equivalente al nivel B-1.
Por último, el catedrático informó que los dialectos mexicanos que están en peligro de extinción son el kiliwa de Baja California; chocholteco de Oaxaca; náhuatl de Veracruz; diapaneca de Tabasco y mochó de Chiapas.
Bibliografía:
Avecevo, María Luisa. "Políticas lingüísticas en México de los años cuarenta a la fecha" en Políticas lingüísticas en México. México, D.F. La Jornada Ediciones: 1997.
Garza, Beatriz. "Las políticas lingüísticas en el mundo de hoy: panorama general" en Políticas lingüísticas en México. México, D.F. La Jornada Ediciones: 1997.
Wurm, Stephen. "Lenguas y culturas en contacto en el mundo de hoy: panorama general" en Políticas lingüísticas en México. México, D.F. La Jornada Ediciones: 1997.
Avecevo, María Luisa. "Políticas lingüísticas en México de los años cuarenta a la fecha" en Políticas lingüísticas en México. México, D.F. La Jornada Ediciones: 1997.
Garza, Beatriz. "Las políticas lingüísticas en el mundo de hoy: panorama general" en Políticas lingüísticas en México. México, D.F. La Jornada Ediciones: 1997.
Wurm, Stephen. "Lenguas y culturas en contacto en el mundo de hoy: panorama general" en Políticas lingüísticas en México. México, D.F. La Jornada Ediciones: 1997.
Me parece muy buena la idea te tener un mejor registro de lenguas indígenas para ayudar a la implementación políticas lingüísticas que eviten la extinción de dichas lenguas, pero ¿Qué, en su opinion, podría hacer los registros más precisos? Creo que es una cuestión que valdría la pena responder, no sólo en esta entrada de blog, sino a un nivel más amplio con el cual se podría tomar algún tipo de acción.
ResponderEliminarPor cierto, me parece que utilizaron los conceptos "lengua" y "dialecto" de manera indiferente en la segunda entrada, o ¿acaso se referían a otra idea?
La única manera de tener un registro más preciso sería, en mi opinión, ir directamente a las zonas cuyas comunidades hablan una lengua indígena. Aunque hay muchas instituciones que se dedican a tener registros de las comunidades indígenas, no se puede saber con exactitud debido a algunos factores que yo pude encontrar:
Eliminar1) Las personas que se dedican a hacer estas investigaciones no hablan ninguna lengua indígena, lo que dificulta los estudios y su acceso a ellas.
2) Normalmente las comunidades indígenas que se encuentran en zonas de difícil acceso. Se encuentran en lugares que incluso los mapas aun no han reconocido.
3) Debido a la ignorancia que algunas comunidades presentan, siguen con la barrera psicológica de la conquista de los españoles; y debido a esto, se niegan a dejar entrar a aquellas personas ajenas a sus comunidades.
La única solución que encuentro para poder acceder a un registro más preciso es empezar por ayudar a estas comunidades que en algunas ocasiones si se encuentran muy marginadas.
Un intercambio de bienes por uno lingüístico.
Demostrarles con buenas acciones que nos interesa preservar nuestras raíces lingüísticas. Por ahí se podría empezar :)